Bienvenido, Mister. Marshall, película comedia-sátira
española del año 1953 dirigida Luis
García Berlanga. Guion de Juan Antonio Bardem, Miguel Mihura y Luis García
Berlanga.
Destaca la interpretación del ser. Alcalde por el gran José Isbert Años 50.
Villar del Río es un pequeño y tranquilo pueblo en el que nunca pasa nada. Sin embargo, el mismo día en que llegan la cantante folclórica Carmen Vargas y su representante, el alcalde (Pepe Isbert) recibe la noticia de la inminente visita de un comité del Plan Marshall (proyecto económico americano para la reconstrucción de Europa). La novedad provoca un gran revuelo entre la gente, que se dispone a ofrecer a los americanos un recibimiento muy especial.
Se relata la historia en un tono perfectamente controlado de las actuaciones. Una farsa apagada con un ligero matiz subterráneo agridulce.
¡BIENVENIDO, MR. AMÉRICA!
Los americanos
llegaron en el 68 para la
explotación del yacimiento de fosfatos en el Sahara Occidental. El precio de las
habitaciones se disparó en el parador y en la única pensión de El Aaiún. Los ciudadanos alquilaron habitaciones en sus
viviendas a un precio desorbitado. Hubo disputas por la repartición de los
inquilinos; familias que antes eran amigos dejaron
de saludarse por ir a la caza del yanki. En el casino de
oficiales les concedieron pases de cortesía
pese al malestar del resto de la
población. En cambio, los comerciantes estaban satisfechos. Los bazares
hicieron el agosto vendiendo gitanillas,
toros y toreros, abanicos y postales “typical
spanish”. Los americanos se quejaban del
tremendo calor, así que también se disparó la venta de ventiladores, y el de
las cubetas de hielo bajo ellos para que el aire resultara más fresco, al menos
hasta que se derritieran, lo cual hizo muy feliz al heladero. Menos acogida popular tuvo la subida
de precios de las bebidas alcohólicas y el de la Coca-Cola. Se popularizó el Manhattan mezclado con Martini rojo seco y whisky a partes iguales.
En la única piscina pública de la que algunos saharauis eran
socios, se les prohibió la entrada no fuera que contaminaran las albas aguas
donde los yanquis remojaban sus traseros.
Cuando los gringos se marcharon, más de un bebé rubio aumentó la población.
El
siroco del Sahara se llevó en volandas los sueños de un mundo mejor mezclados con los letreros baldíos de ¡Bienvenido Mr. América!
Isabel Caballero
250 palabras